El consultor internacional en marketing político Pablo Rojas consideró que el ganador de las elecciones presidenciales tendrá limitaciones en cuanto a su accionar en el gobierno. Por ello indicó que, desde la campaña de segunda vuelta, los candidatos van a tener que adoptar una etapa de negociaciones.
“Me parece que cualquiera que resulte
ganador del balotage va a estar limitado. Creo que la distribución del
Poder Legislativo ya está hecha y es muy compleja. Sí o sí va a haber que
iniciar una etapa de negociaciones previa a cualquier tipo de proyecto y eso va
a llevar tiempo, esfuerzo y energía para un periodo que, aunque parezca largo,
pasa muy rápido”, comentó.
También analizó la estrategia que pueden utilizar tanto
Pedro Castillo como Keiko Fujimori para la segunda vuelta. Dijo que esperaría
que el comportamiento de los candidatos sea mantener sus posiciones iniciales,
sin embargo, conforme se acerque la elección, tratar de conquistar votos.
“Lo que viene es una conquista, por tanto, van a tener que
seducir a ciertos candidatos que es altamente probable que no coincidan
ideológicamente en muchas de las cuestiones que ellos plantean. Ahí es donde va
a empezar una moderación discursiva”, explicó.
En cuanto al papel de las demás fuerzas políticas, Rojas
señaló que su importancia va a depender de su nivel de aceptación en el
electorado.
“¿Qué puede ofrecer hoy un candidato que ha tenido un voto
de 2%? Hay que buscarlo igual. Pero, ¿qué le puedo ofrecer yo? Por ejemplo, en
el caso de Pedro Castillo que obtuvo el 18%, ¿qué voy a ofrecer si voy a hablar
con la gente de Humala con 1.5%? Nada, desde el punto de vista de cargos y espacios,
solo por la afinidad discursiva”, indicó.
En cuanto al papel de otros candidatos como Yonhy Lescano,
resaltó que sí puede existir una “negociación más seria” por bordear el 10% de
los votos. También indicó que Rafael López Aliaga podría tener un acercamiento
con Keiko Fujimori por ser cercano ideológicamente. No obstante, observó que la
candidata de Fuerza Popular podría tener “serios problemas” para establecer
alianzas por la imagen negativa que conlleva.
Retos y posibilidades
El experto señaló que, a partir de ahora, el reto de Pedro
Castillo es manejar las limitaciones ideológicas fuera de su agenda propia, lo
que no se vio en la primera vuelta. “Recordemos que Pedro Castillo no participó
de aquel famoso debate en el cual se invitaron cinco candidatos por un medio de
TV en hora central. Creo que la agenda que atendieron esos candidatos fue la
agenda de los medios. Y nunca hay que dejar de sopesar que los medios son un
actor interesado”, comentó.
Mencionó que ambos candidatos presentan distintos niveles de
certeza para un gobierno futuro. En el caso de Keiko Fujimori, el ambiente
mediático sí podría adivinar “qué es esperable” de ella en un gobierno. En el
caso de Castillo indicó que, más bien, es “una incógnita”.
“Creo que hay muchos actores que están jugando, no a favor
de Fujimori, sino en contra de Castillo por la incertidumbre que genera para
sus negocios. En ese caso, Castillo va a tener que empezar a generar una agenda
propia que incluya a muchos lados, sobre todo a la gente de centro que, hasta
ahora, evidentemente, no ha sido captada por ninguna oferta electoral anterior”,
precisó.
Indicó que, así como el candidato de Perú Libre tendrá que “permear”
los límites ideológicos planteados originalmente, Keiko Fujimori podría jugar
en su contra para asegurarse una mejor imagen.
“Las posibilidades son apostar al espanto que pueda generar
la idea de que Pedro Castillo es el nuevo Maduro de Latinoamérica. Es decir,
anteponer una imagen peor a la que tiene ella, que le pueda dar una
oportunidad. Y en ese caso uno de los socios importantes puede ser el poder
mediático que es quien creo que ya está jugando. Creo que hay gente con poder
económico que tiene una incertidumbre grande de lo que significa Castillo. Sin
embargo, de Fujimori tiene un mapa de lo que podría esperarse”, mencionó.
Lecturas de la primera vuelta
Rojas comentó que la sorpresiva victoria de Castillo en la
primera vuelta implica una lectura que va más allá de los medios de
comunicación. En esa línea señaló que un error que comete la democracia
occidental es la “subestimación del elector individual”.
“Cuando se lo esconde a un candidato no significa que el
poder del voto no lo vaya a acompañar. Creo que Castillo se ha ganado el
reconocimiento de ir en contra de la agenda no visible de los medios de
comunicación. Y también el tema regional. El interior existe, el interior vota.
Subestimar al electorado es un error gravísimo”, indicó.
Por último, señaló que el escenario político que está vive
Latinoamérica está generando una complicación para el grado de certeza de las
encuestas, algo que se observó en estas elecciones. “Los ciudadanos de repente
tienen un nivel de apatía mayor, incluso una indecisión. No está de más decir
que la fragmentación del escenario político ha sido excepcional en este caso”,
refirió Rojas.
Escrito el 14 de abril de 2021
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